miércoles, 5 de marzo de 2008

Cuándo la realidad supera la ficción....




Esta es una historia de amor y tragedia que quiero compartir, me la conto una amiga, y aqui va:


"En un barrio común y personas normales, llega de visita una extranjera, una española de 18 años llamada Melisa, a la casa de unos parientes. Una tarde conoce al vecinito de 17 años, Cristhian, la cual provoca una atracción inmediata, parecia sólo un amor pasajero, hasta ese momento. Ella, vuelve a su país natal, pero nunca se puedo olvidar de él, le escribio por varios años, sin obtener respuesta.
Melisa, por su lado se dedico a sus estudio; y Cristhian, con los años forma una familia y tiene su primer hijo.
Cuando Melisa cumplía los 24 años, decide volver. Al verse, se dieron cuenta que la pasión que sentía por ambos aún seguía intacta. Ambos desaparecieron por una semana, tratando de recuperar tanto tiempo perdido.
Melisa retorna a España, y no volvio a escribir por pedido de Cristhian, ya que debía entender que su vida ya estaba encaminada y no podía abandonar a su actual familia, por un momento de pasión.
Pasan los años, parecía todo ya olvidado, hasta que un amigo de él, encuentra de casualidad un aviso en internet, que se buscaba el paradero de Cristhian. Cuándo lo ve, se da cuenta que era Melisa. Logra comunicarse, y ella le cuenta que estaba muy enferma, que no la estaba pasando nada bien, que había logrado obtener un tesoro muy preciado, que le daban las fuerzas para seguir, y con el tiempo se enteraría. Cristhian preocupado, insiste por sabes mas, sin respuesta alguna.
Una mañana revisando, como siempre su correo, se da con una carta de Melisa. Allí, ella relata que intentando re-hacer su vida, conocio la persona equivocada, con el afan de olvidarse de él, que lamentablemente, eso provoco el contagio de una terrible enfemedad mortal, que lo único que le dio fuerza hasta llegar a esta instancia, fue ese tesoro hermoso que Dios le dio, un niño de tan solo 6 años, que había parido antes de contagiarse. Que lamentaba no poder decirselo personalmente, ya que seguramente cuando este viendo esta carta ya no este en el mundo. Pero si debía perdirle que cuidara de ese niño y lo amara, ya que era el hijo de ambos......."
Triste pero cierta, obviamente cualquier similitud, es pura conhincidencia.
Espero haberla relatado lo mejor posible, ya que no tengo experiencia en esto, pero creo que valia la pena contar.
P.D.: La flor blanca es mi último cuadro, espero que le gusten.